La peonza es un juguete de madera que se hace bailar sobre una punta, lanzándolo con una cuerda o haciéndolo girar con la punta de los dedos.
Es un juguete muy antiguo. Se dice también que, era un instrumento para obtener fuego por rozamiento, haciéndola girar sobre un trozo de madera en posición horizontal.
En la antigua Grecia y Roma los niños jugaban a la peonza. Platón la describió como strobilos.
De los variados juegos conocidos que se hacen con una peonza, los más conocidos son: “Sacar las monedas del corro” y “Chocar la peonza”.
Sacar las monedas del corro. El juego consiste en sacar unas monedas del círculo con la peonza, siempre bailando. El primer jugador lanza la peonza sobre las monedas, si la peonza baila, la coge en la palma de la mano, entre el dedo índice y el corazón, y procura dar con el eje de la peonza en la moneda, hasta sacarla del círculo. Todas las monedas que el jugador saque, bien sea de golpe directo al lanzar la peonza, bien impulsándolas con la peonza, son para él. Una vez sacadas todas las monedas, se vuelve a poner monedas y sigue la jugada.
Chocar la peonza. Esta modalidad de juego consiste en lanzar la peonza contra otra que está, sin bailar, en el suelo y hacer que choque con ella, bien en el acto del lanzamiento, bien cogiéndola con la palma de la mano y dejándola caer sobre la que está quieta.
Hasta no hace muchos años se construían de madera, actualmente también se fabrican con plástico.
Las peonzas en Centroamérica, también son conocidas como trompos y pueden ser de tres clases, las cometa, las tradicionales y las saturno.
Las cometa son las más fáciles de usar, las saturno se utilizan para hacer acrobacias aéreas y exhibiciones.
En diferentes lugares del mundo existen museos dedicados a las peonzas y trompos, así tenemos:
En España un museo de la peonza en Antequera dedicado al mundo de las peonzas, trompos y perinolas.
En Estados Unidos el “The Spinning Top Museum” en Burlington (Wisconsin).
En Japón el Museo del Trompo en Nagoya
En Catalunya se conocen diversas variantes de la peonza o “baldufa clásica, el virolet (se lanza con los dedos), el trompitxol (sin punta y de forma cónica se lanza con un pequeño látigo) y el ”giroscop” (inventado por Lèon Foucault en 1852) que constituye la variante más científica.


