Antiguamente la chimenea era considerada el corazón de la casa, un lugar acogedor donde se reunía la familia que con el calor del fuego compartían animadamente sus historias y leyendas.
… pero también creían que era la puerta de entrada y salida de los espíritus, por esta razón había que mantenerla limpia y para esto se necesitaba un instrumento con poderes mágicos que alejasen a los malos espíritus que se pegaban al hollín. Y este era el acebo. Continuar leyendo